El sábado 19 de Octubre y como continuación a la Conferencia “Venturas y desventuras de la Universidad de Alcalá” que tuvimos dos días antes, realizamos una visita a Alcalá de Henares. El señor D. Arsenio Lope Huerta nos acompañó en todo el recorrido. Durante el mismo, nos explico in situ, la historia de la Universidad y de otros muchos edificios emblemáticos de la ciudad.
Empezamos la visita a la Universidad por el
Colegio Mayor de San Ildefonso cuya fachada es obra de Rodrigo Gil de Hontañón.
A continuación y ya en el interior pasamos a través de los patios a la Sala del Paraninfo, donde se entrega anualmente el prestigioso
Premio Cervantes. Destaca por su techo estilo mudéjar. Uno de sus laterales
está presidido por la cátedra desde la que se leían las tesis y en sus paredes
se puede leer el nombre de alguno de los más prestigiosos alumnos que por ella
pasaron.
A
continuación salimos al patio llamado trilingüe, por haber acogido estudiantes de latín, griego
y hebreo, y tras una breve explicación volvimos sobre nuestros pasos para
acceder de nuevo al patio de los filósofos, donde siglos atrás en uno de sus laterales se encontraba la
propia cárcel de la
Universidad y en el de enfrente la puerta llamada de la
“gloria” por donde salían los estudiantes que acababan los estudios.
Nos encaminamos hacia la salida pasando por el patio
de Santo Tomás de Villanueva, primer santo salido de sus aulas,
con un elegante pozo situado en el centro y rodeado de paredes, con tres
pisos de balcones, decorados con bellas balaustradas rematadas en frisos.
Ya en
el exterior nos dirigimos hacia la Plaza
Cervantes pasando por delante de la iglesia de San Ildefonso, con una
hermosa fachada coronada por una espadaña y cerrada provisionalmente al
público.
Al otro
lado de la plaza visitamos el Corral de Comedias, el más antiguo de España, sus
orígenes se remontan al año 1601. Se trata de un pequeño y coqueto teatro que
ha cambiado su fisonomía y su uso a lo largo de los siglos.
En el
centro de la Plaza
Cervantes pudimos observar el monumento a Miguel de Cervantes y en su lado sur, las
ruinas de la iglesia de Santa María la Mayor, cuya
enorme nave central fue destruida en un incendio en 1936. En el solar se halla el campanario
que un día perteneció al conjunto.
A la
izquierda se sitúa la antigua hospedería de
estudiantes y el Casino. Al otro lado de la Plaza destaca el ayuntamiento de la ciudad.
Salimos de la Plaza frente al Convento de
Santa Úrsula y por la calle del mismo nombre pudimos ver en la distancia el
antiguo Convento de Agustinas de Nuestra
Señora de la
Consolación. Girando a la derecha llegamos a la calle Mayor, la
calle porticada más larga de España y que surgió como eje comercial del barrio judío
durante el siglo XII. En ella se encuentran el Hospital de Antezana y la Casa natal de Cervantes donde
hicimos una parada. En la calle aledaña pasamos por la Casa natal de Manuel Azaña,
político que llego a ser Presidente de la segunda república de España y el Convento
de Carmelitas Descalzas de la
Concepción, antiguo palacio medieval con una
bella portada plateresca de Alonso de Covarrubias y que corona la imagen de la
virgen.
Caminando
por la calle Santiago llegamos a la
Plaza de las Bernardas desde donde pudimos admirar el Monasterio Cisterciense de San Bernardo,
levantado en 1617 y cuya sencilla fachada principal de estilo barroco está
construida en ladrillo. A la derecha de la plaza se encuentra el Colegio Convento de Dominicos, que
alberga el museo arqueológico regional y en el que destacan su portada barroca
y el claustro monumental donde se conservan los vestigios de la ciudad romana
de Complutum.
A la
izquierda de la plaza, el Palacio Arzobispal, en su dilatada historia ha sido
residencia de los arzobispos de Toledo desde el siglo XIII hasta el siglo XIX, vio
nacer a Catalina de Aragón y a Fernando de Austria y en el tuvo lugar la primera
entrevista entre Cristóbal Colón e Isabel la Católica. El conjunto
arquitectónico está formado por una mezcla de estilos fruto de una accidentada
historia que acaba con un incendio en 1936. Sobrevivieron al mismo la gran nave
del salón de concilios y dos torreones.
Destaca el majestuoso escudo en el
ventanal sobre la entrada principal.
A
continuación nos dirigimos a la Catedral Magistral. Su fachada principal
construida en piedra de sillería, sigue el estilo gótico isabelino con rasgos
del renacimiento. La portada de estilo gótico está presidida por una imagen de San
Ildefonso. Destaca también su preciosa torre.
Después
de una visita de casi cuatro horas y con el agradecimiento por haber podido
disfrutar de los conocimientos y la atención
del señor Arsenio, nos fuimos a disfrutar de una merecida comida, tras
la cual y después de unas horas de tiempo libre regresamos a Guadalajara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario